Para cuando son las 10 de la mañana, empieza la fatiga. Para muchas personas almorzar es una de sus partes favoritas del día y el nivel de compromiso, productividad y estabilidad en el trabajo, están relacionadas con las pausas realizadas a la hora de almorzar. El medio día se convierte en un espacio para compartir con los compañeros y aunque algunos disfrutan de las comidas que han preparado en casa, muchos disfrutan el tiempo en un lugar fuera de la oficina para comer. Estás personas notan más energía, mejoran su desempeño y el día les parece fluir con mayor rapidez.
El estrés y la carga de trabajo contribuyen directamente en la salud de los trabajadores. Mientras que el 90% considera que el almuerzo de una hora es “fundamental” al aceptar un nuevo puesto, más de la mitad de los trabajadores pasan menos de 30 minutos en un almuerzo.
La hora de almuerzo es fundamental para la satisfacción del empleado, aquellos que están conformes con las políticas de la empresa y el horario de almuerzo, tienen más probabilidades de estar satisfechos con sus trabajos, trabajar en la misma empresa y recomendar al empleador a otros.
Los trabajadores en algunas ocasiones se sienten juzgados, estresados y ansiosos por cómo se perciben cuando toman el almuerzo, lo cual causa una discrepancia entre el personal y la administración, a continuación te mostramos unas estadísticas de está percepción:
- El 34% de los jefes considera qué con frecuencia un empleado toma un descanso para almorzar en los periodos de evaluar su desempeño laboral.
- El 22% de los jefes piensa que los empleados que toman un almuerzo regular son menos trabajadores.
- El 13% de los trabajadores piensan que sus compañeros de trabajo los juzgarían negativamente si tomaran un almuerzo regular.
- El 88% de los jefes piensa que sus trabajadores dirán que se les anima a tomar un almuerzo regular, pero solo el 62% de los trabajadores se siente animado.
Por último, desde el punto de vista de seguridad, alentar a los trabajadores a tomar un descanso para aclarar sus mentes podría generar menos accidentes y lesiones .
Entonces, si tomar el almuerzo beneficia a los trabajadores desde el punto de vista mental y físico, ¿por qué no cambiar la forma en que se percibe esta rutina? En lugar de preguntarse si podrá tomarse un descanso, en cambio pregunte: ¿qué hay para el almuerzo?